Empresas industriales se ven afectadas por la pandemia.
La crisis y la emergencia por la pandemia del coronavirus en el mundo han llevado a una notoria fractura en las diferentes economías de los países con la paralización de diversas actividades empresariales. En el caso de Bolivia se informó de un riesgo inminente en el cierre de muchas empresas, por lo que representantes industriales solicitan al gobierno plantear soluciones a la iliquidez y recesión económica.
«Hay empresas que por esta crisis mundial han perdido su naturaleza y hay otras que tienen el tema de iliquidez y de una posible insolvencia. Van a haber empresas que cierren, específicamente del sector exportador a países de Italia y China, donde tienen una muy fuerte contracción económica por el tema del coronavirus. Así que ya no tienen el mercado para poder exportar, esas empresas van a tener o que cerrar o reestructurarse», dijo hoy durante un conversatorio digital Humberto Borth, director de la empresa Altifibers.
La crisis es mundial y las secuelas económicas por el Covid-19 afectarán a gran parte de los países, es así que hace unos días J.P. Morgan Chase Institute estableció que a nivel internacional el 50% de las empresas tienen una capacidad en torno a 27 días para continuar cumpliendo sus obligaciones salariales, crediticias, tributarias, pago a proveedores, pagos a la seguridad social, etc. si sus ingresos se paralizan (amortiguación de efectivo) en la actual emergencia sanitaria del Coronavirus.
«Una vez que se superen los 27 días, una de cada dos empresas ingresarían en un proceso de iliquidez y posterior insolvencia para honrar sus obligaciones salariales, crediticias, tributarias, pago a proveedores, pagos a la seguridad social, etc. que las conducirían al cierre inminente de sus actividades económicas», detalla este estudio.
En Bolivia y muchos países más se han determinado medidas drásticas para la lucha contra el coronavirus, muchas van ligadas a la paralización de varias actividades laborales, el confinamiento y la cuarentena total. Desde el Gobierno, a través del Ministerio de Trabajo, se suspendieron las actividades laborales en entidades públicas y privadas del país para ingresar en cuarentena total, aunque en algunos sectores se ha incorporado el teletrabajo desde los hogares, siempre y cuando cuenten con acceso a internet.
Se dispuso también que habría excepciones en las operaciones de empresas e instituciones puntuales como medios de comunicación, de servicios públicos e industrias para la provisión de alimentos y productos esenciales, el sector de salud, así como las fuerzas del orden Policía Nacional y Fuerzas Armadas, entre otros pocos más.
«De las 35 mil industrias existentes en Bolivia sólo 1.600 industrias están trabajando. Son industrias esenciales en esta emergencia sanitaria: alimentos, farmacéutica y productos químicos (…) dos tercios de la fuerza laboral ingresó en el paro de sus actividades, producto del impacto del coronavirus y solamente un tercio está realizando sus actividades vía home office live (trabajo desde casa)», dijo por su parte Raúl Crespo, presidente de la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz).
Ante esto y el riesgo del cierre de varias empresas, desde Candipaz se solicita al gobierno una reunión con la presidenta, Jeanine Áñez, y su gabinete económico.